A pesar que la Sony a7III tenga un año en el mercado y, que siguen aparecido otros modelos avanzados, esta cámara no deja de ser un referente en el mundo de la fotografía. Te explicamos por qué.
Cámara Sony a7III: ¿Qué la hace tan especial?
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No tenemos razones para mentirte, esta cámara de Sony es el sueño de muchos fotógrafos, sobre todo por su polivalencia, ya que va muy bien para hacer reportajes, realizar fotos deportivas, sesiones en estudio, capturar la naturaleza, etc.
Evidentemente esta versatilidad de la a7III deriva de su gran potencia, de su calidad de imagen, entre otras características que destacaremos a continuación:
Diseño y ergonomía
Para empezar, este modelo de la marca japonesa cuenta con un buen tamaño para aportar un agarre óptimo, aunque quizá deja un poco que desear para personas con manos grandes.
De igual forma, presume de cuatro botones personalizables y sus menús es uno de los aspectos que los usuarios valoran muchísimo, gracias a que puedes configurarlos a tu manera para evitar navegar por las numerosas opciones de la interfaz.
Visor y autonomía
Su visor electrónico es una maravilla. ¿Te preguntas por qué? Es simple; su nivel de resolución es inmejorable, y es que alcanza hasta 3,69 millones de puntos con tecnología OLED.
Siendo honestos, podrás notar la diferencia desde un primer momento. Eso sí, el brillo es uno de sus puntos más destacables, de hecho todo parece indicar que duplica el brillo de su antecesor: la A7R II.
Si hablamos de su autonomía, su modelo de batería es mucho mejor de lo que muchos piensan, ¡os animamos a probarlo!
Modo de disparo múltiple con Pixel Shift
Con la integración de esta característica, la Sony a7III no tiene nada que envidiarle a otros modelos sofisticados.
Y es que las prestaciones del sensor y el sistema de estabilización que integra este dispositivo, le permiten lograr una captura múltiple, desplazando el sensor en un píxel por cada cuatro exposiciones.
Sistema de enfoque y rendimiento
El sistema de autoenfoque también es otra de las cosas que no podemos pasar por alto de esta cámara, especialmente porque le saca partido a la última tecnología y añade puntos.
En palabras más precisas, la a7III combina un sistema de detección de fase híbrida con 399 puntos junto con un sistema de autoenfoque por contraste que llega hasta los 425 puntos disponibles.
¿Qué significa esto?, que su autoenfoque es muy eficiente a nivel general, sobre todo en ambientes con poca luz.
Por otro lado, debemos añadir que el rendimiento de este dispositivo de fabricación japonesa es excepcional; de hecho es una cámara muy veloz con 10 fps y hasta 28 RAWs consecutivos y 76 en JPEG.
Calidad de imagen
Las imágenes que se obtienen con esta cámara no dejan indiferente a nadie, y más cuando son en formato JPEG. Nadie puede negar que los colores que captura su lente son muy reales, la nitidez es genial y los detalles se aprecian perfectamente.
Estabilizador de cinco ejes y vídeo
Algo que nos hace sentir orgullosos de esta cámara es que la resolución UHD 4K a tamaño completo del sensor y el característico modo Super 35 mm de Sony, permiten grabar a 1080p a 120p con opción de grabación a 24 o 30p.
Además, si agregamos las opciones personalizables de este modelo, incluyendo su alta velocidad de transmisión de los archivos, entre otras novedades como el sistema AF, la usabilidad al momento de grabar vídeo es un punto que te hará valorar más esta cámara.
Por supuesto, debemos recordar su sofisticado sistema de estabilización de cinco ejes que permite conseguir mejores resultados en las grabaciones.
Lo cierto es que la Sony a7III es una cámara muy especial que merece la pena adquirir, ya que te servirá para diferentes ramas de la fotografía (como comentamos en líneas anteriores). ¿Lo dudas? Pruébala y verás que no estamos mintiendo.
Ya dicho esto, nos leemos en un próximo post 🙂
¡Me apasiona el mundo de la fotografía!
Desde que era pequeñita toda mi familia me regalaba cámaras de juguete y ya me encargaba yo de fotografiarlos a todos sin excepciones 🙂
Me encanta la fotografía de recién nacido (Newborn) y realizar todo tipo de sesiones infantiles con bebés y niños pequeños. No sé quién se lo pasa mejor… ¡si ellos o yo!
También realizo sesiones fotográficas Smash Cake donde aprendemos de los peques de la casa y nos divertimos viendo como destrozan un pastel.
Valoro mucho aprender día a día, por eso realizo cursos de manera continuada sobre software digital, iluminación, imagen… e intento sacar tiempo para hacer todo tipo de eventos, sesiones y fotografías de cualquier tipo, ya sea por hobby o por encargo.